domingo, 16 de diciembre de 2012

Emigración en los 60

Mucha gente piensa que esto de salir de España es coser y cantar, muy fácil. Y cuando les dices que la cosa no es tan fácil te sueltan eso de que en los 60 muchos españoles emigraron y encontraron trabajo a los dos días. No se dan cuenta que la situación en los 60 es completamente distinta a la de ahora. En los 60 no tenían gente para trabajar, gran parte de los hombres habían muerto en la guerra y las mujeres no trabajaban.

Mucha de esa gente que emigró en los 60 nunca se adaptaron, ni aprendieron el idioma, y han vuelto a España. Pero también muchos se quedaron. Sólo en la zona donde yo vivo he localizado una familia de gallegos y otra de andaluces en una calle, y otra familia de andaluces en otra. Y esto sólo en el vecindario. Son gente mayor con hijos tulipanes.

Pero bueno, no me enrollo más, lo que quería es pegaros un documental que se hizo aquí en Holanda. Está a partes en español con subtitulos holandeses y a partes en holandés con subtítulos en español. Espero que os guste. A mí particularmente me ha llegado al alma. Especialmente porque las fábricas de las que hablan están en Utrecht (Y de Bilt, que está aquí al lado)  

Parte 1


 


 Parte 2


 


Parte 3


  

8 comentarios:

  1. Me ha gustado el reportaje. Qué majos los abuelos. Eso si que debió ser duro: dejar atrás a hijos pequeños.

    Gracias por compartirlo.

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  2. Nos pusieron un trozo de este documental en clase de historia en el instituto.

    La gente que se cree que nada ha cambiado desde los 50-60, es porque no quiere oir la realidad. Vivir en su mundo perfecto es más fácil.

    Como tú has dicho, muchos hombres habían muerto y había otros tantos tullidos. Hubo ciudades que quedaron destrozadas, así que había que reconstruirlas. Por lo que cualquier persona con 2 manos y 2 brazos era el trabajador perfecto. No les pedían ni el idioma porque si no, no conseguirían trabajadores suficientes.

    Hoy en día no podría ser más distinto. No se necesitan a alguien a quien enseñar a poner un ladrillo encima de otro en 2 días, sino gente con profesiones más especializadas. Vayas a donde vayas tendrás competencia, y habrá que sepa el idioma, o lo sepa a medias. Si tú ni lo hablas, serás el último a que escojan.

    Eso no significa que no se pueda emigrar, sino que no se puede plantar uno con una mochilla en la que solo llevas un par de bragas en cualquier ciudad y conseguir trabajo a la de ya.

    Por otro lado, muchos ni aprendieron el idioma y volvieron porque no vieron eso como emigrar a otro país, sino trabajar, trabajar y trabajar sin descanso durante unos años para ahorrar, y después volver. No querían quedarse. Otros sí, y esos sí se quedaron.

    Por cierto, hoy en día también mucha gente deja atrás a hijos pequeños. Hoy en día, y hace 10 años, y hace 20. Aquí, y en muchos otros países. En Irlanda conocí a una niña que vivía con su abuelo mientras sus padres trabajaban en UK. En UK conocí a un hombre que trabajaba entre semana en una ciudad y algún fin de semana que tenía libre volvía al pueblo a ver a sus hijos.
    La vida no es dura desde ayer, lo que pasa es que muchos vivieron en su mundo feliz hasta ayer.

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  3. Muy duro el reportaje, especialmente la ultima parte. Gracias por compartirlo!

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  4. Que duro!
    Soy hija de emigrantes y aunque ahora soy una más del grupo, mi experiencia de emigrante no se parece en nada a la de mis padres. Ellos no tuvieron que dejar chiquillos atrás, pero si una vida entera que jamás volvieron a recuperar.

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  5. Esto me recuerda que hace poco conocí a una señora de unos 70 años que acababa de volver de Holanda, donde había vivido casi cuarenta años. Como la cola en Correos (sí, era Correos) era muy larga, acabo contándome casi toda su vida de emigrante. Una de las cosas que más me sorprendió es que ella decidió emigrar siendo jovencita porque la señora de la casa que limpiaba, una de esas esposas de médico que tanto postín se traían en la época, le recomendó que lo hiciese, porque si no sus hijas estarían condenadas a ser asistentas y chachas, como la señora que me hablaba. Así que lo comentó con su marido y emigraron. Ya en Holanda, se quedó viúda, así que buscó trabajo para sacar adelante a sus hijas. Dos cosas de su historia me parecieron especialmente tiernas:
    - Que, como al principio ella no hablaba holandés, cada vez que escuchaba una palabra que no conocía se la apuntaba (fonéticamente) en la mano para después preguntarles a sus hijas, que estaban en el cole, qué significaba. Todo eso lo iba apuntando en una libretita.
    - Una de sus frases, más o menos literal: "Así que nos fuimos a Holanda como podríamos habernos ido a Alemania. Porque, de aquella, el cabr*n de Franco no te dejaba hacer muchas cosas, pero sí marcharte. Podías ir a donde quisieses, excepto a Corea del Norte. Ya te lo ponían en el pasaporte: 'No puede usted ir a Corea del Norte'... Pero era porque allí te mataban. Bueno, allí te mataban y aquí a algunos también, claro".

    Dicho todo esto, no creo que emigrar, en aquella época o en esta, sea algo fácil.

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  6. Que daño hacen esos programas de españoles por el mundo.

    Acaban de publicar un reportaje en "el país" donde ponen que mucha gente emigra a México (7mil en 4 años según el artículo... no me parecen tantos) y que vienen porque en España no tienen oportunidad. Pero luego resulta que todos los entrevistados vienen con las lentejas resueltas desde España; no ponen ningún ejemplo de alguien que venga a la aventura y se saque, no las lentejas, sino el solomillo por sí solo sin problemas... ¿Por que será?

    (http://sociedad.elpais.com/sociedad/2012/12/16/vidayartes/1355683241_924585.html)

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  7. Pues sí, fue duro, pero más duro fue el rechazo de la sociedad que les acogió (se les acusaba de ruidosos y bla bla bla).

    Aplaudieron con las orejas cuando consiguieron el acuerdo con Turquía para la importación de trabajadores (pensaron que estos no se quedarían y que, además, eran menos ruidosos de esos italianos y españoles)... Les salió el tiro por la culata y hoy dichas políticas de inmigración se estudian como lo que no se debe hacer...

    Emocionante historia: mil millones de gracias por compartirla con nosotros Pelocha :-))

    Paquito.

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  8. me recuerda al documental "el tren de la memoria" que salió hace unos años y emocionó a los emigrantes en las salas de cine de Bélgica. os lo recomiendo.

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