miércoles, 9 de noviembre de 2022

Conciliación

 MiniP ya tiene año y medio. Cómo pasa el tiempo y cómo de rápido crece. Y cuanto más crece miniP , más crecen las inseguridades de mamá.

Una de las cosas con las que mamá tiene conflictos ahora mismo es con el trabajo. Que conste en acta que el trabajo no tiene conflictos con Pelocha, el conflicto está únicamente en la cabeza de Pelocha.

Pelocha es muy perfeccionista, y vamos a decirlo también, una curranta. Siempre me han gustado los trabajos en los que no tienes ni un segundo para quedarte quieta, en los que tienes mil cosas por hacer y que vas saltando de una cosa a la otra casi sin respirar. Pelocha además trabaja mucho mejor bajo presión. Cuanto más grande es la pila de trabajo que sacar adelante, más motivada está y más eficiente es...

Claro, que pasa con Pelocha ahora mismo? Lo que describo en el párrafo de arriba es algo difícil de compatibilizar con noches sin dormir.

Desde Septiembre, yo creo que no he sido capaz de tener una semana normal de trabajo. De esas de trabajo ininterrumpido de 9 a 5 . Igual que pasó el otoño pasado, casi todas las semanas o bien miniP está malita (y por tanto ni puede ir a la guardería ni duerme bien por la noche) . A eso suma que la mamá de día de vez en cuando se pone malita y tampoco puede cuidarla.

Que miniP esté en casa no significa que mamá y papá no hagan su trabajo. Significa que mamá y papá se tienen que dividir el tiempo para cuidar de miniP y rascar horas de tiempo libre, de tiempo juntos y de sueño para sacar el trabajo adelante. Por ejemplo, mamá se levanta pronto y trabaja de 7 am a 12 mientras papá cuida de miniP. Ahí mamá ha rascado unas 5 horas de trabajo. Las otras 3 se dividen entre siesta de miniP (si tiene un buen día y duerme) y a partir de las 8pm cuando miniP duerme. Papá empieza a trabajar a las 12 y trabaja hasta la noche con pausa para cenar.

Primero, me siento afortunada de trabajar en un sitio en el que puedo flexibilizar mis horas de esta manera para poder atender a mi hija. Tengo la suerte también de tener más días de vacaciones que puedo usar. Pero por otro lado, encadenar una semana tras otra con este horario te deja muy poco tiempo (y energía) para nada. Y en las horas de trabajo das para mantener todas las bolas en el aire, pero no tienes energía ni capacidad mental de ir más allá. Yo que siempre he querido hacer más y mejor, nuevos retos, casi que tengo que estar contenta con mantenerme dignamente en donde estoy ahora mismo.

Yo estaba preparada para la etapa de bebé, pero no estaba preparada para lo que tengo encima.

Hace medio año o así asistí a un training en el que se discutía el papel de la mujer en el trabajo. Y, entre muchas otras cosas, se discutía la maternidad y el trabajo. Una de las mujeres que participaban en el el training dijo algo así como que la mujer puede volver de la baja maternal y seguir trabajando al mismo nivel que antes de tener hijos. Que quien no lo hace es porque no quiere. Es cuestión de organizarse. Esta persona dijo haber sido capaz de volver a trabajar 12 horas diarias, asistir a eventos extras por la tarde noche etc etc. Cuando escuchas algo así, y ves que tú justito te viene, piensas, qué estoy haciendo yo mal?

Nada, no estás haciendo nada mal. Esa persona probablemente tiene un marido, unos abuelos o una canguro que puede hacerse cargo del bebé no sólo durante las horas de trabajo sino también por las tardes. Esa persona igual sí duerme por la noche y por tanto está fresca por la mañana. Esa persona igual prioriza su trabajo y no sus hijos, quizás por voluntad propia, o quizás no. Esa persona igual tiene los mismos problemas que tú pero los esconde detrás de una fachada de mujer fuerte. 

Yo no soy una mujer fuerte, no escondo, yo exteriorizo, verbalizo. No me importa decir que no he dormido una mierda esta noche y que ahora mismo necesito tres cafés sólo para no quedarme dormida. Y aún así soy capaz de hacer mi trabajo.

Y repito, estoy en un ambiente laboral privilegiado. Con flexibilidad. Y con compañer@s que se ayudan entre sí, que se apoyan y que no buscan clavarte el puñal por la espalda ni agrandar tus inseguridades. Tengo la suerte de tener un marido que es un padrazo, y que también tiene un trabajo flexible que le permite atender a su hija.

Pero igual que veo los privilegios que tengo, también tengo que mencionar que nosotros no tenemos apoyo familiar, mi familia está en España, y la familia del tulipán también vive fuera del país

Cuesta mirar hacia adelande y aceptar que la situación no va a mejorar, sobre todo porque en el futuro, mamá y papá quieren encargar hermanit@ para miniP. Y eso es vuelta a empezar con embarazo de mierda, bebé que no duerme, cabeza-desastre, mocos, gripes....

Para las mamas/papas, cómo te sentiste los primeros años? Y para los no papas y mamás , cómo veis a vuestros compañeros de trabajo que sí son padres? 

3 comentarios:

  1. La vida sin hijos es bastante complicada. Con hijos, debe ser la hostia.

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  2. Claro tienes toda la razon! Hay gente q tiene la suerte de tener à sus padres jovenes y cn buena salud vivendi en la misma calle. Yo no tengo esa suerte ;)😉 tb hay gente q los niños nunca tienen fiebre ni mocos ni estan malos. A mi no me paso eso tampoco ;). Pero mientras sean cosas no graved ( otitis anginas catarros etc) se sale adelante

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  3. "You can't have it all": somos la generación que se nos dijo que podíamos tenerlo todo, en particular a las mujeres, pero la realidad es que no llegamos, mucho menos con churumbeles de por medio.

    En los casos que conozco, el padre y la madre han reducido sus jornadas laborales (el trabaja de Martes a Viernes y ella de Lunes a Jueves), la guardería 3 días a la semana (donde coincide que ambos están trabajando) y muchísima planificación (no voy a entrar en los casos donde la tía ha reducido su jornada 2 días y el tío ninguna: en algunos casos, han sido ellas las que lo han decidido así y en los otros no quiero preguntar, porque todavía me cabreo).

    Mi hermana, que tiene 2, lo está viviendo de forma peculiar: la parte "zombie" (los primeros años, con el insomnio y demás de lo que son churumbeles que o no se duermen o duermen mal) se acaba y empieza la parte contestataria y nuclear (los niños tienen energía cuasi-infinita y la parte de ir buscando los límites de los adultos para encontrar la forma de salirse con la suya minan a cualquiera).

    Por eso no quiero tener hijos: entiendo los problemas de los padres que veo a mi alrededor y pienso que yo no podría (acepto mis limitaciones).

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