En Agosto os daba el último update de mi loca, y, aunque os contaba que Kiva tiene mucho que mejorar, veía progreso, lo cual me hacía ver las cosas de forma más positiva. Aún así Kiva no era ni es una perra fácil que todo el mundo sepa y pueda llevar. Y bueno, Kiva es una perra a la que hay que entender...
A lo que iba. No todo es un camino de rosas con esta perra. Os conté que Kiva iba una vez por semana a clases de adiestramiento para perros de trabajo. Nos expulsaron y de malas maneras. La perra en la primera mitad de clase se portaba bien y hacía todo, pero en cuanto se hartaba, empezaba a ladrar y no paraba. Las correcciones que la profesora nos proponía aplicar Kiva se las pasaba por el forro. La profesora pensó que teníamos que aplicar correcciones más severas. Hablamos con ella y le explicamos todo el pasado de Kiva...y nos dió el contacto de otra persona para que consultaramos una solución para las clases. Nos dieron cita para dos semanas después. Antes de pasar las dos semanas la profe nos mandó un sms diciendo que nos devolvía las clases pagadas y no asistidas porque ella no sabía qué hacer con Kiva. Una persona que se vende como especialista en perros de trabajo y perros "con pasado" nos echa porque no sabe qué hacer con Kiva. Tócate los coj.
Decidimos no cancelar la cita con la otra especialista. Y maldita la hora. Porque pagamos 177 euros para que una persona nos dijese que Kiva tenía que estar en la jaula 18 horas al día (para dormir). También apuntó que lo que yo llevo un año haciendo (y que ha hecho que Kiva mejore una barbaridad) no es socialización sino confrontación, y que es malo malisísimo para Kiva. En teoría, un perro sólo puede lidiar con una situación de estrés a la semana, y nosotros la estamos sometiendo a estrés 7 días a la semana. Sin decirlo abiertamente recomienda cancelar su paseadora (esa que está haciendo un trabajo estupendo), sus citas de sábado, el hotel perruno de vacaciones (donde la conocen y la tratan genial) y las dos veces al mes que nos apuntamos a paseos de Pastores alemanes + belgas. Todo eso fuera, y a observar perricos desde lejos lejos y meterle galletas en el garganchón. Mi cara era tan transparente que la experta me preguntó si voy a seguir las pautas o no. Y yo le dije que, como entenderá, me cuesta entender por qué tengo que dejar de hacer lo que funciona y volver a aplicar un método (BAT, para los entendidos) que no solo no le fué bien, sino que le fué muy mal....con dos cojones me respondió que lo que no funcionó hace un año no tiene por qué fallar ahora. Perdonemé usted señora experta pero experimentos con gaseosa, no con mi perra. Otra de las ideas brillantes fue insinuar que, ya que estamos completamente en contra de Prozac y demás drogas, administraramos a Kiva "algo" natural. Valeriana, porque Kiva muestra constantemente estrés. A día de hoy, aún estamos esperando (y nos haremos viejos antes de tenerlo) el informe por escrito. Hemos reclamado el informe y no hemos recibido respuesta alguna. Ahora tenemos que decidir si reclamarlo oficialmente o no. Pero siendo sincera, no nos apetece una mierda pelearnos para recibir un informe lleno de basura.
Hablamos con la paseadora (que en su día tuvo una escuela perruna) y ella no ve estrés constante en Kiva, ni cree que tenemos que evitar perros, ni cancelar actividades, ni mucho menos encerrar a Kiva 18 horas al día. Es simplemente una perra más movida que la media. Y tampoco le parece un caso tan difícil como para que llevemos un año de especialista en especialista recibiendo recomendaciones absurdas de drogar al bicho.
El viernes 27 de Octubre la llevamos a ver a una conocida mía que entrena perros policía y que está acostumbrada a casos muy jodidos. Si esta persona también nos decía que Kiva es un bicho, mejor nos jubilamos. Os podéis imaginar los nervios que yo llevaba de camino al sur de Holanda, en el coche. Decir que esta persona NO se dedica a adiestrar perros de particulares, y que la conozco a través de un foro. Esta persona, al ver que estábamos un poco al límite de nuestras fuerzas, se ofreció a ver a Kiva GRATIS, sin cobrarnos ni un duro, y convencida de que Kiva no puede ser un caso tan extremo. Nos recibió en su casa y nos llevó a un parque donde los perros pueden ir sueltos y ahí evaluó a Kiva y a nosotros.
Sus conclusiones son que Kiva es simplemente una perra insegura y que tenemos que ser muy claros con ella. Blanco y Negro. Nada de grises, porque en los grises se pone nerviosa. Cuanto más claro tenga Kiva qué se espera de ella, más tranquila estará. Luego nos dijo que a pesar de ser insegura, a Kiva la pones en una situación desconocida y la capea como puede, y siempre tiene como una actitud perruna positiva. Ella observó que a veces damos una orden a Kiva (sit, por ejemplo) y ella obedece, pero se toma su tiempo, y entre medias nosotros insertamos unos cuantos eh-eh, ah-ah, uh-uh o repetimos la orden, todo por no castigar el que se esté tomando su tiempo. Tenemos que eliminar todas esas palabras intermedias. Son como la mamá que le dice al niño, si haces esto te castigo. Te voy a castigar. Mira tú que te estoy avisando de que te voy a castigar. Pues eso....
Ese mismo día empezamos a implementar los consejos que nos dió, y qué cambio! La perra está mucho más tranquila, mucho menos hiper. El cambio ha sido inmediato! Es difícil de explicar, pero visitar a esta persona nos ha servido para, primero, confirmar que estamos en el camino adecuado, y segundo, darnos cuenta de unos pequeños errores que, al corregirlos, han resultado en un gran cambio!
Esta persona nos ha avisado de que en un par de semanas, cuando Kiva se adapte a los cambios, tendrá unos días de intentar pasarse todo por el forro, y que ahí tenemos que ser muy consecuentes.....
Y es que, a cada perro hay que mirarlo de forma individual, e intentar entenderlo. No vale con medicar todo aquel que se sale de la norma!
Lo que es la vida: estaba revisando los posts pendientes contigo y, de regalo, me llevo uno "calentito calentito".
ResponderEliminarMe sorprende la actitud de los "adiestradores profesionales": sin tener ni pajolera idea del asunto ni de la historia, no me sorprende en cambio el desenlace: "Esta perra me va a hacer trabajar, y a mí eso de currar como que me da alergia".
Tengo un post pendiente (otro más) sobre el tipo de cosas que veo a mi alrededor al respecto: la actitud de gente que se vende como experta en equis, i griega o zeta, pero que en cuanto se da la situación donde, se supone, son buenísimos, lo que hacen es darse el piro y, en lugar de solucionar, se ponen de perfil a dar opiniones vacías.
Al menos encontraste a alguien que, de forma generosa (eso nos da esperanza en este mundo: siempre hay un santo en Sodoma) te ayudó a entender cómo enfocar el problema...
Y ahora, poco a poco, a seguir adelante: en el fondo, los amores más reñidos son los más queridos y, por esa regla de tres, me consta que tu realmente quieres a "la trasto" (y, en el fondo, con todos sus problemas, estoy seguro de que "la susodicha" te quiere con locura, aunque le cueste expresarlo a través de sus actos).
Bonita historia y follow-up... El exigente lector se ha pegado una jartá de posts esta tarde y se despide feliz como una perdiz :-))
Lo que les pasa Paquito, o al menos es mi experiencia, es que se especializan en XYZ y todo lo que se salga un poco de lo normal, no les interesa. Que digo yo, que yo si tuviese una escuela de perros, y me llegasen a diario problemas del estilo, mi cachorro me rompe la casa, o mi perro no vuelve cuando le llamo, o me estira de la correa, todos problemas muy normales, me aburriría un poco, y estaría encantada de que me llegase un perro un poco distinto que me hiciese aprender algo nuevo. Pero no, hasta donde yo me he topado (excepto la paseadora de Kiva), todo lo que se sale de la norma, cuesta trabajo y no me interesa a estas alturas esforzarme.....Esta perra lo que le pasa es que con el adiestramiento en positivo (muy de moda, premiar, no castigar nunca) se te sube a la chepa. Y los métodos muy light de castigar, se los pasa por el forro. Hemos tenido que buscar una forma de corregirla/castigarla que no se pase por el forro. Al fin y al cabo, es como a los niños. Y oye, como la seda va la perra!! Que no es tan difícil leches!!
EliminarEso sí, con todas sus imperfecciones, deja a la gente flipada por la calle de lo obediente que es....pero tiene una dueña muy exigente, que le va a limar esas imperfecciones :D
Uffff. Me da miedo comentar algo porque te estarás acordando de mi y toda mi familia.
ResponderEliminarMe alegro que vaya la cosa mejor.
Si me acuerdo de tí leopol será para bien, gracias a tu enlace, está conmigo :D . Porque por mucho reto que sea esta perra, es un amor, es muy buena perra, tiene muy buen fondo. Los problemas que tiene son culpa de su dueño anterior. Y bueno, me está haciendo sudar un poco, pero, y lo que estoy aprendiendo con ella??? :D
EliminarPor cierto, si un día quieres conocerla, eres bienvenido :D