jueves, 20 de agosto de 2015

Sal con un valiente

Hace ya un rato largo que no escribo nada personal, de esas cosas que salen del alma y que sólo escribo refugiandome detrás de una pantalla. Esas cosas que escribo engañándome a mí misma y pensando que me leen cuatro gatos y que, en realidad, sólo conocen a Pelocha, pero no a mí, a mi nombre y mis apellidos. Pero, para que vamos a engañarnos, ni sois un puñado ni sois, muchos de vosotros, desconocidos.

El caso es que buscando a ver cuando fue ese último rato de intimidad entre nosotros, me he encontrado con un post que empecé a escribir hace muchos meses, pero que nunca llegó a ver la luz. Un post provocado por un link que alguien que conozco puso en su facebook y que me llegó al alma. Os recomiendo leer el link antes de continuar:

http://www.eluniversodelosencillo.com/sal-con-un-valiente/

Leer ese link me removió todo. Supongo que estaba también en una epoca más sensible o en un día menos racional, porque hoy me lo he vuelto a releer y me ha tocado mucho menos, aunque no por ello me parece un texto peor, que conste.

Volviendo al tema del post, si algo he aprendido de mi ex es a huir de los cobardes como uno huye de la peste. Porque mi ex era un cobarde. Ser cobarde no es ser mala persona, que conste, puedes ser una persona excelente y seguir siendo un puto cobarde...y yo de cobarde, no quiero saber nada. No los quiero como pareja, pero tampoco quiero amistad con gente que no le pone un par de huevos a esta vida.

Si me topo con alguien que con 30 años o más me responde que no sabe qué quiere en su vida, salgo corriendo como si me fuese la vida en ello. Con 30 años ya tienes que saber qué quieres, o al menos qué no quieres en esta vida, porque ya no tienes 15 años, ya no eres un adolescente, ya no deberías pensar sólo en hoy sino también deberías pensar en que existe un mañana. Y si tú no sabes cómo quieres que sea tu vida dentro de 5 o 10 años, tampoco vas a saber si quieres alguien a tu lado o no, ni si quieres que la persona que ahora está a tu lado sea la que siempre lo esté.

Durante este verano, la pregunta que me hizo mucha gente es, Pelocha, y tú qué, para cuando noviete? Ya es hora de que te quites el luto no? No, ni luto ni hostias. Yo no quiero a una persona a mi lado porque sí, para no estar sola. Por gracia o desgracia sé muy bien lo que quiero. Sé que tipo de persona quiero a mi lado, y no los encuentro cada día. Cada día me cruzo con un montón de hombres que me parecen guapos. Cada día veo hombres que, diciendolo así un poco a lo bestia, tienen un polvazo. También he conocido hombres interesantes, simpáticos y agradables aquí y allá. Pero ya. No despiertan ningún interes por mi parte. En muy escasas ocasiones me he topado con alguien que, así a voz de pronto, podría encajar con lo que busco. Y ahí se ha quedado, en un pensamiento fugaz. Y a otra cosa mariposa.

También este verano un par de conversaciones profundas, con miembros del genero opuesto, que parece que sirvieron para poner palabras a las cosas que pienso o que siento. Es extraño que a veces es dificil sacar de tu mente los pensamientos y traducirlos a palabras. O a imagenes. O a cualquier otro formato que permita compartirlo con otros humanos y que se entienda. Una de las conversaciones, con mi novio en la universidad, M, sirvió para definir, para poner palabra a una característica que siempre busco en un hombre. Ser buena persona, tener buen corazón, buen fondo. Tan fácil y tan difícil. Parece que sí, pero en realidad no abunda mucha gente en este mundo con este atributo. Además es algo que no se ve tan fácilmente. No es tan visual como la belleza, el dinero o el poder. Todas mis ex relaciones estables son buenas personas, y mis ex ligues duraderos tambien. Pero las buenas personas a veces hacen cosas malas. Esa misma conversación sirvió para pensar que, a veces la vida es muy puta, y te pone personas en tu camino en momentos equivocados. En mi caso, a mí la vida me puso en mi camino a una persona que me ofrecía estabilidad y toda una vida juntos cuando yo no estaba en esa fase, y años después, cuando yo lo que busco/buscaba es, precisamente estabilidad y futuro juntos me puso en mi camino a alguien que salió por patas ante esa perspectiva. Qué hubiese pasado si la vida hubiese intercambiado el orden? Pues no se sabe ni nunca se sabrá. De echo, tampoco quiero saberlo.

Mi segunda conversación con especimen de género opuesto fue también intensa. El susodicho ha salido relativamente hace poco de una relación que le ha tocado. Estamos en fases completamente diferentes yo creo coincidimos en algo. No estamos preparados para otra relación. Yo personalmente me he acostumbrado a estar sóla. Hago lo que me apetece, sin contar con nadie. Entro y salgo como quiero, como lo que me da la gana, viajo donde quiero como quiero y con quien quiero, y organizo mis días, vacaciones y fines de semana de manera completamente unilateral. Cada cita que he tenido no ha sido con ilusión sino más bien pensando en lo que pierdo: mientras estoy tomando un café con un completo desconocido, no estoy invirtiendo ese tiempo en amistades o en mí misma. Y esa es más o menos la visión que tengo ahora de una pareja. Sí, me encantaría tener a un compañero de vida a mi lado, pero, si me pongo a pensar en el tiempo, dinero, esfuerzo, emociones, etc que tienes que invertir en una persona hasta que de verdad se convierte en compañero de vida, me da una pereza horrible y me vienen a la cabeza mil alternativas en las que invertir todo eso. Y todo esto sin siquiera contabilizar 'los intentos' , toda esa gente que se sube a tu vida y se baja en la siguiente parada, bien porque tengáis destinos diferentes o bien porque esa persona nunca tuvo intenciones de iniciar un viaje largo contigo. Y, en este mindset, en este estado mental, lo mejor que se puede hacer es mantenerse al margen, no vale experimentar, porque hay que ser consciente que cuando juegas, juegas con los sentimientos, el tiempo, el esfuerzo y las emociones de otra persona....

Mi frase hace algunos años era lo que no te mata te hace más fuerte, hasta que Mortizia, una ex bloguera y amiga dijo "what does not kill you leaves you a scar" (lo que no te mata te deja una marca)...y me adueñé de su frase. Supongo que esta es la marca que me dejó alguien que nunca mereció tener lo que yo le ofrecía, por buena persona que sea. Ningún cobarde merece que ninguna persona le ofrezca absolutamente todo lo alcanzable y lo inalcanzable.

Y si ver o pensar en M. normalmente me inspira sentimientos de admiración, cariño y ternura por alguien que fue importante en mi vida, pensar o ver al tulipán despierta lo peor de mí, asco, ira, odio...

6 comentarios:

  1. Ciertamente, vamos juntando citatrices... Opino lo que tú, estar con alguien por no estar sola sería ser muy cabrona. Cuando se está en una relación, ambos implicados deben ser honestos para con el otro.

    Alguien con miedo a avanzar debería buscarse amig@s con derechos, y todo el mundo tendría claro que aquello no daba para más.

    Suscribo casi todo lo que dices.

    ResponderEliminar
  2. Hola. Fíjate que yo no había leído el enlace y estoy 100% de acuerdo con lo que dice. A pesar de que yo después de 2 años aún estoy muy tocado porque precisamente fui valiente y arriesgué, creo que hay que seguir siéndolo. Pero esa "marca" que te deja una relación fallida también es un handicap. Te hace más fuerte, pero también más duro o más exigente con el otro/la otra.

    Yo sí quiero vivir en pareja y también pienso que cada mes que pasa es una tarea más difícil. Con casi 46 "tacos" encontrar a alguien con el que complementarse y compartir tus manías, tus alegrías, tus vicios, tus penas, tus desórdenes y tus órdenes... no es fácil. Con 20-25 se aguantan muchas cosas de tu pareja; con 45 ya no aguantas a nadie; para mí, eso es un error, porque hay que tener mucha más empatía con la otra persona para llegar a una relación estable. Es cierto que el desgaste emocional lo sufres más, pero creo que también eso es de valientes y hay que lanzarse y no ser egoístas.

    En fin, tarea difícil la del amor, pero siempre hay un roto para un descosido, así que ya surgirá.

    Besos... ¿para cuándo una visita a Galicia?

    ResponderEliminar
  3. Joder: ¡Cómo estaba la cosa!

    Los criterios son siempre personales: mi criterio es encontrar a buenas personas... Ha llegado un punto en el que ese es mi criterio...

    Quizás es también debido a mi experiencia: sólo puedo decir cosas buenas de mis ex-parejas... ¿Qué las cosas no funcionaron? Quizás fui yo, que soy bastante "peculiar", pero algo que puedo decir de todas ellas es que, todas, tuvieron siempre un gran corazón.

    ¿Fui y soy afortunado? Sin duda... No sé cómo lo hago, pero tengo suerte en la vida: quizás es porque he aprendido a resistir los embistes sabiendo la diferencia entre lo que está bien y mal (a pesar de los malos momentos, que en algunos casos, fueron horrendos).

    ¿El truco para encontrar a la pareja perfecta? Sólo que te respete... No tiene ni que compartir tus gustos, ni tus aficiones, ni pollas en vinagre (¡Cuánto daño han hecho las comedias románticas de Meg Ryan)... Sólo tiene que respetar tu visión de la vida y tu camino, nada más.

    Todo lo demás, si está, bienvenido sea, pero no ha porqué.

    A ver si me animo a escribir, que yo también estoy vaguete.

    Paquito.

    ResponderEliminar
  4. Primero, no soy "M" ;P

    Segundo, tengo la misma suerte y visión / criterio con Paquito, aunque yo buscar no busque. Eso sí, también pienso que es cuestión de hablar menos y demostrar más, cada vez veo más palabras traicionadas y grandes frases matizadas.

    Finalmente, me encanta la metáfora de la relación del cerdo y la gallina dónde uno pone el bacon y la otra los huevos. Soy cerdo y sólo quiero cerdos en mi vida ;-P

    No sé si conoces {Pelocha | "querido lector" } este cómic http://zenpencils.com/comic/103-c-s-lewis-to-love-at-all/ pero me he acordado de él mientras leía la entrada, ¿no me digáis que no os suena?

    ResponderEliminar
  5. Me ha gustado mucho este post tan personal, maduro y claro.
    Has dicho verdades como templos. Como dicen por ahí "quizás sí eras tú pero no era el momento".
    Lo importante es que estés a gusto en la situación en la que estés y tú lo estás así que a disfrutarla al máximo que la vida son etapas.

    AlSur

    ResponderEliminar
  6. Buenos días Pelocha

    En primer lugar, enhorabuena por esta entrada, no te miento si te digo que la habré leído como media docena de veces, porque es de las que te hacen reflexionar más de la cuenta.

    A mí también me las tiraban cuando era más jovencito con el mantra de “A ver si te echas novia de una vez”, y la verdad, al principio hace una poco de gracia, pero estar rodeado de Celestinas “Aconsejándote” acerca de lo que hacer con tu vida sentimental, pues la verdad, a veces me daban ganas de mandarlos a tomar por culo.

    Pero lo más odioso es cuando había una típica comilona/cena/celebración y por “Casualidad” te ponían junto a una chica que no tenía pareja… para mi (Y supongo que para ella también) no dejaba de ser algo humillante vernos en ese trance con todos alrededor escrutando cada uno de nuestros comentarios y gestos, como si fuéramos bichos examinados bajo un microscopio.

    Hasta que un día, cuando menos te lo esperas y en el lugar más insólito, amanece en tu vida la persona que lo cambia todo a tu alrededor, sin siquiera proponértelo ni buscarlo, como fue a la postre mi caso.

    Sólo me queda desearte que la vida te sonría.

    Antxon.

    ResponderEliminar