Hoy celebraba el Instituto Cervantes el día del español. Como S. trabaja allí, me animé a ir con C. y con mi hermano y una vez allí con otras españolas que conozco. Tenían en el patio a un montón de niños medio tulipanes medio latinos pintando las paredes.
A la 1 tenían paella y degustación de vinos, ceviche, pisco, mini tapas latinoamericanas, etc Después hemos ido a una actuación de flamenco....bueno, ver a un grupo de holandesas cantar y bailar flamenco y sevillanas no tiene precio. Es una cosa rara, se saben muy bien los pasos y los hacen muy bien, pero les falta algo, les falta el carácter, el temperamento, la sangre...no sé muy bien como llamarlo. Aún así había un par de chicas que sí parecían saber lo que estaban haciendo....
El ir me ha servido para darme cuenta que en Utrecht hay mucha familia tulipanoespañola asentada, no la gente que yo me encuentro, que son más jóvenes, y están más de paso. Y eso me ha gustado. He conocido a dos paisanas de Zaragoza!! 20 años aquí en Holanda, que se dice pronto, con sus tulipanes y con los niños.
Por cierto, queda comprobado...la mezcla entre español y holandés da lugar a unos niños muy guapos!!! jajajaja
¡Pues nada nada! ¡Al lío! (Además, estoy seguro de que a tu Pelocha le encantará tener a alguien con quien jugar :-)).
ResponderEliminarUn abrazo,
Paquito.
Huy a mí para eso aún me queda mucho, no sé si la pelocha llegará a conocer mi descendencia...
ResponderEliminar"...pero les falta algo, les falta el carácter, el temperamento, la sangre...no sé muy bien como llamarlo."
ResponderEliminarEl duende, Pelocha, el duende :D